Una de las fiestas granadinas por excelencia. Cada tres de Mayo las calles de todos los pueblos y de la capital granadina, alli donde hay cruces fijas o dónde no, se llenan de gente para contemplar nuestras engalanadas cruces decoradas para la ocasión.Esta fiesta  singular y de tradición tan granadina se celebra desde hace muchos años.

    

En Dúrcal se adornan las dos cruces de piedra que hay en nuestra localidad de manera permanente, la cruz del Darrón y la cruz de la Ermita.También en algunos barrios los vecinos improvisan cruces que adornan con macetas, plantas, mantones de Maníla, sábanas, flores, objetos de cobre, figuras religiosas y cualquier elemento referente al esta singular fiesta.

En este día las calles del pueblo que van en dirección a las cruces son transitadas por numerosos vecinos y vecinas de la localidad,muchos de los cuales van vestidos con trajes de gitana sobre todo, los más pequeños de la casa.